Luego de más de cuatro años de tramitación, el presidente Gabriel Boric finalmente promulgó la ley de Royalty Minero, una iniciativa la cual tiene como objetivo utilizar recursos de la gran minería para potenciar el desarrollo de las regiones.
Según explicó el primer mandatario, a partir de 2024, se comenzarán a recaudar recursos provenientes de este nuevo esquema tributario, el cual está enfocado en las mayores empresas del sector minero y que son aquellos explotadores mineros cuyas ventas provienen en más de un 50% del cobre, y con una producción mayor a 50.000 toneladas métricas de cobre fino (TMCF) al año.
De esta recaudación, unos US$ 450 millones serán distribuidos para impulsar el desarrollo de las regiones y comunas del país a través de 3 fondos:
El royalty, muy común en el mundo, es un impuesto específico a la minería, considerando que esta explota recursos naturales escasos y no renovables, dejando una alta ganancia.
El Presidente Boric destacó que Chile necesita avanzar en una descentralización efectiva inyectando más recursos a las regiones, ya que “el camino al desarrollo es con justicia territorial”.
En ese sentido recalcó que con esto se busca que las regiones tengan mayor autonomía y que los recursos que genera la gran minería retornen de manera importante a las localidades de origen, promoviendo la inversión, el desarrollo y una mejor calidad de vida para las familias.